Día 7: Zagan y Poznan

Kilómetros aproximados: 375.

Comenzamos el día con un espectacular desayuno buffet, con una gran variedad, subimos a por las maletas, hicimos el check-out, pagamos el parking (60 zł); y a las 8’45 estábamos en marcha, además al ser domingo no había nada de tráfico para salir.

El primer tramo del viaje era autovía, y nos llamaba la atención la gente que se veía que iba a coger setas, luego ya pasamos a un tramo de carretera nacional.


Después de unas dos horas de viaje, tocaba la primera visita del día que iba a ser el CAMPO DE PRISIONEROS STALAG LUFT 3, este tipo de campos no tenía nada que ver con los campos de concentración, en ellos sólo podían ser internados prisioneros de guerra, nunca civiles. Dirección: Lotników Alianckich 6 (en la carretera 296 que es la que llega a Zagan). Horario: 10 a 5. Precio: 5 zł.


En este campo está basada la película “La Gran Evasión” muy famosa por las escenas de Steve McQueen.

Foto: www.leelibros.com

Fue un campo de prisioneros de guerra de la Luftwaffe, construido en mayo de 1942 en un bosque junto a la ciudad; habían seis campos de este tipo. Sus prisioneros eran pilotos, inicialmente americanos y británicos; pero más tarde se recluyó a pilotos de otras naciones. Fue conocido sobre todo por algunas fugas sonadas, en la mayor de ellas, más de 80 soldados alcanzaron temporalmente la libertad.

Bajo la dirección del mayor Roger Bushell se excavaron tres túneles con los nombres de “Tom”, “Dick” y “Harry”. El túnel principal de huída debía ser “Tom”, el reserva era “Harry” y “Dick” era el destinado a ser descubierto en caso de que se sospechase que se estaba cavando un túnel en el campo, y así desviar la atención de los alemanes. “Tom” fue descubierto por casualidad tras cinco meses de excavaciones, y a partir de entonces se concentraron en “Harry”.

La noche del 24 al 25 de marzo de 1944 a las 22’30 comenzó la huida a través de “Harry” que medía unos 100 metros de largo y transcurría a unos 8 metros bajo la superficie. Pero la hora de la fuga se retrasó porque el suelo en esa época del año estaba helado y se tardó cuatro horas más de lo planeado en perforar la superficie; y además resultó unos 10 metros demasiado corto, así que la salida no se encontraba en el bosque, sino algo antes. Todo esto alteró el desarrollo planeado de la huida y pronto resultó evidente que no huirían los 220 prisioneros como se había planeado; la fuga fue detectada a las 4’55 horas y en ese momento habían cruzado el túnel 87 personas, al final sólo 3 evitaron ser capturados.

Por decisión de Adolf Hitler se mató a 50 de los prisioneros que habían tratado de huir, entre los ejecutados, estaba líder de la operación, Roger Bushell.

Aquí se encuentra un museo con una pequeña exposición, con objetos encontrados en el campo y una maqueta del campo de prisioneros.



También hay un barracón, que es una réplica, quizá demasiado nueva, pero este es un proyecto que comenzó en 2004; porque es ahora cuando están intentando recuperar todo aquello. El barracón está cerrado, te lo abre una empleada, que no se como averiguamos que hablaba italiano, así que aprovechamos para preguntarle algunas cosas.





Fuera hay una especie de réplica del túnel, al que puedes bajar; es de cemento y cristal.


Y este cartel, que no nos pudimos resistir.


Con las indicaciones que nos había dado la empleada que hablaba italiano, continuamos hacia el pueblo 1 kilómetro más o menos, si te vas fijando a la derecha ves el cartel, si sabes lo que vas buscando, sino ni sabes lo que te has pasado. Luego tienes 1 kilómetro pero por un camino de tierra, yendo despacito no hay ningún problema, cruzas unas vías, y tiene algún bache pero está bastante bien. Como vas despacito es fácil de localizar, además a la derecha se ve una torre de vigilancia, justo enfrente hay una especie de pequeño memorial y allí al lado se puede aparcar.


Del campo original y del túnel no queda prácticamente nada, pero si se sabe su ubicación exacta; la explicación de que no quede nada es muy simple, todo era de madera y cuando acabó la guerra la gente cogía cualquier cosa de madera para construirse viviendas y calentarse, y lo poco que quedó en su sitio acabó desapareciendo por la humedad; todo esto nos lo contó Diego en Cracovia, y es aplicable prácticamente a todos los lugares en Polonia.

El campo está en un espeso bosque y hay carteles con escenas de la película "La Gran Evasión" que van indicando a que pertenecía cada ruina, lo único que queda son las bases de los barracones que eran de ladrillos en algunos casos.







El túnel esta hecho con piedra para que veas cual era su recorrido, indicando entrada (dentro del campo) y salida (al exterior en el bosque) donde se encuentra un pequeño memorial. La verdad es que la visita a nosotros nos gustó.









Inmortalizamos las vías que cruzamos, que son la línea que va a Zagan.


Seguimos hacía la Estación de Trenes (Dworzec Kolejowy), está bastante vieja, aunque uno piensa que ya no circulan trenes, no es así, ya que hay horarios y una persona vendiendo billetes. Dirección: Kolejowa 88.







Ya era hora de comer, así que continuamos hacia el centro de Zagan, pero estaba cortado por obras y nos liamos un poco, y al final aparcamos algo más lejos del centro de lo que esperábamos y tuvimos que preguntar por la Rynek, porque era allí donde estaba el restaurante que buscábamos, entonces llovía un poco pero no molestaba.

Cuando llegamos al Kepler estaba casi vacío, pero se ve que era algo pronto porque se acabó llenando, vamos, que llegamos en la hora prefecta para no esperar, los chicos pidieron sopas y luego pedimos ensalada, pollo y salmón; todo muy bueno en especial la sopa de Alfredo, que era una típica polaca o algo así, todo con las bebidas nos costó 119 zł (unos 9 € por persona).








Luego sin demora, al coche, todavía nos quedaban alrededor de tres horas de viaje hasta llegar a Poznan, que era donde íbamos a pasar noche; cuando llevábamos una hora más o menos empezó a llover muy fuerte, pero como íbamos por autovía la visibilidad era aceptable, aunque llegamos a pasar unos 20 o 30 minutos terribles; también fuimos un rato por autopista (27 zł). Cuando llegamos a Poznan chispeaba, y con la poca luz que había, los cables de tranvías y que apenas veíamos a gente por las calles, no nos resultó muy acogedora en la primera impresión.

Llegar al Ibis Poznan Centrum, nos resultó muy fácil ya que la carretera nos llevaba hasta allí sin perdida; metimos el coche en parking, hicimos el check-in y en 10 minutos salimos a dar una vuelta. Seguía chispeando pero queríamos llegar a la Rynek antes de que fuera completamente de noche; nos pillaba a unos 10 minutos andando del hotel.

La bonita STARY RYNEK, ella sóla hace que merecezca la pena llegar hasta Poznan, es una bonita plaza rodeada de casas de la antigua burguesía en diferentes estilos. Como en el día de ayer en Wroclaw, también nos recreamos e hicimos un montón de fotos.





La tarde estaba desapacible con la lluvia, a aquellas horas ya había poca luz, y no íbamos encontrar nada abierto que visitar, nos acercamos a una iglesia que había por allí cerca y luego nos fuimos a un bar a tomar unas cervezas; los bares tenían mucha expectación por la final de voleibol Polonia-Brasil.

Antes de ir a cenar pasamos nuevamente por la RYNEK para verla de noche, también lucía bien bonito el RATUSZ (ayuntamiento); la verdad es que estaba bastante bien iluminada la plaza. Al final había merecido la pena hacer noche aquí, aunque no tuviéramos tiempo más que para dar una vuelta por la Rynek.





Y ya era hora de cenar, fuimos a uno que nos pillaba ya de camino al hotel Chatka Babuni, donde la carta son principalmente pierogis, eso sí, hay de muchos rellenos y también con la diferencia de que los hay al horno, además de los de los tradicionales que son al agua; nosotros pedimos dos platos de los de horno (z pieca) y un plato de los de agua (z wody), a simple vista puede parecer poco, pero estuvo bien, sólo que esta vez si acabamos con un poco de hueco para el postre, pedimos una tarta que habíamos visto con muy buena pinta para compartir entre los tres. La cena estuvo bien nos gustó mucho, todo con las bebidas costó 79 zł (unos 6 € por persona). Muy barato y además el local era todo de madera muy confortable.





Incluso los baños eran una chulada.



Después, paseando tranquilamente en menos de 10 minutos volvimos al hotel; y como todas las noches, un poco de internet y a dormir.

2 comentarios:

  1. Vaya! desconocía la localización de este campo y mira que pasamos cerca. Me ha gustado mucho y, aunque quede poco o nada de lo original, resulta muy interesante. Además, la película me entusiasma. Ves, de Poznan me esperaba más bien poco y me encanto. La plaza es muy bonita. Lastima que tuvierais lluvia.

    Besitos.

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    1. Pues a nosotros también nos gusta mucho la película, primero encontramos que estaban enterrados algunos en el cementerio de Poznan y a partir de ahí tiramos el hilo y ya lo encontramos. La plaza de Poznan es una preciosidad, como todas las que vimos; lo de la lluvia pues bueno, molestó un poco, pero dejaba pasear.
      Saludos.

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